Mantener los neumáticos en buen estado es esencial para que tanto usted como los pasajeros tengan un viaje seguro. El estado de los neumáticos puede además afectar a la distancia de frenado del vehículo sobre suelo mojado.

Hay muchos factores a tener en cuenta a la hora de elegir los neumáticos: agarre, maniobrabilidad en suelo mojado y seco, estabilidad a altas velocidades, comodidad al volante, niveles de ruido, percepción de la carretera y consumo de combustible. Sin embargo, una de las decisiones es muy sencilla: con Lexus elegirá unos neumáticos diseñados específicamente para su Lexus.

Si los neumáticos se deterioran, también lo hace su experiencia de conducción. Un mayor desgaste afecta a la distancia de frenado de su coche en suelo mojado, poniendo en riesgo la seguridad del conductor y los pasajeros. A pesar de ello, con los neumáticos correctos conseguirá el nivel de agarre necesario para tomar curvas, frenar y accionar la transmisión desde el motor eficazmente.

Estar a la vanguardia del mantenimiento de los neumáticos no solo implica un aumento de su seguridad, sino que también disminuye la probabilidad de tener que realizar reparaciones costosas en el futuro. Unos neumáticos en buen estado son la reparación más económica, ya que garantizan un nivel óptimo de consumo de combustible.

Al detectar y atajar los indicios de desgaste de los neumáticos se pueden evitar problemas como las grandes distancias de frenado, el aquaplaning y los reventones de neumáticos. Los indicadores más comunes de desgaste son la baja presión de los neumáticos, rodaduras parciales, vibraciones en el volante, ruidos atípicos, tendencia a desplazarse hacia un lado y mala maniobrabilidad sobre mojado.

Si reconoce alguno de estos indicios, visite su Concesionario Lexus más cercano para realizar una revisión de neumáticos. Para evitar problemas relacionados con los neumáticos, los expertos de Lexus recomiendan que compruebe la presión de los neumáticos periódicamente en busca de cambios, que se asegure de que la profundidad de la rodadura nunca esté por debajo del mínimo legal de 1,6 mm y que inspeccione los neumáticos periódicamente con relación a cualquier corte, desgaste u objetos incrustados.